Pues resulta que ando lesionado. Como
dice el amiguete Humberto, cuando te duele algo de lo que te sabes el nombre, eso ya no es dolor sino lesión. Pues yo, por culpa de mis últimos devaneos con
la carrera a pie, arrastro una rotura fibrilar (autodiagnosticada) en los
isquiotibiales de la pierna izquierda, ¡toma ya! Debido a esto tengo bici,
zapatillas y bañador bastante aparcados y estoy cogiendo lastre a pasos
agigantados.
Este pasado fin de semana anduve por nuestra
sierra, con base logística en Galaroza, aprovechando un día de vacaciones para construir
un pequeño puentecillo y disfrutar de aquellos parajes.
La cuestión es que el sábado, harto ya de
llenar canastos y canastos de níscalos, decidí encalomarme en la gorda de
emergencia que tengo por allí (mi querida “BH Churrero”) para dar un paseo
relajado, sin forzar la pata para no romperme. Opté por lo más suave que se
puede hacer por aquellos lares: Galaroza-Aracena-Galaroza por carretera. No es que sea
llano pero no tiene sofocones que impliquen esfuerzos excesivos.
La cosa es que cuando no llevaba ni tres
km por carretera veo un camino que sale a la derecha con una pinta fenomenal,
entre árboles, alfombrado de hojas de castaños… en fin, una monería. No me pude
resistir, sentí “la llamada de la Sierra” y me adentré por aquel camino aunque jurándome
que a la menor dificultad en forma de repecho me daría la vuelta y regresaría
al negro asfalto para no poner en riesgo mi maltrecha musculatura ¡Los cojones!
Dos horas me pegué camino arriba, sendero abajo, trialera que va, riachuelo que
viene… disfrutando como un cochino en un charco. Afortunadamente la pierna
aguantó, a costa de ir siempre con un cuidado extremo y de hacer las subidas
apretando casi a la pata coja.
En fin, quien me lo iba a decir a mí, que
hasta no hace demasiado tiempo huía de senderos y caminos como de la peste y
que llamaba a los que montaban sobre ruedas gordas “mariquitas de montaña”. Jota,
no te reconozco, ¿que ha sido de aquel carretero convencido de hace unos años?...
P.D.: la foto está tomada, sin permiso, de un Sr. llamado Manolo Torres.
P.D.: la foto está tomada, sin permiso, de un Sr. llamado Manolo Torres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario