miércoles, 14 de diciembre de 2011

LA LLAMADA DE LA SIERRA



Pues resulta que ando lesionado. Como dice el amiguete Humberto, cuando te duele algo de lo que te sabes el nombre, eso ya no es dolor sino lesión. Pues yo, por culpa de mis últimos devaneos con la carrera a pie, arrastro una rotura fibrilar (autodiagnosticada) en los isquiotibiales de la pierna izquierda, ¡toma ya! Debido a esto tengo bici, zapatillas y bañador bastante aparcados y estoy cogiendo lastre a pasos agigantados.

Este pasado fin de semana anduve por nuestra sierra, con base logística en Galaroza, aprovechando un día de vacaciones para construir un pequeño puentecillo y disfrutar de aquellos parajes.

La cuestión es que el sábado, harto ya de llenar canastos y canastos de níscalos, decidí encalomarme en la gorda de emergencia que tengo por allí (mi querida “BH Churrero”) para dar un paseo relajado, sin forzar la pata para no romperme. Opté por lo más suave que se puede hacer por aquellos lares: Galaroza-Aracena-Galaroza por carretera. No es que sea llano pero no tiene sofocones que impliquen esfuerzos excesivos.

La cosa es que cuando no llevaba ni tres km por carretera veo un camino que sale a la derecha con una pinta fenomenal, entre árboles, alfombrado de hojas de castaños… en fin, una monería. No me pude resistir, sentí “la llamada de la Sierra” y me adentré por aquel camino aunque jurándome que a la menor dificultad en forma de repecho me daría la vuelta y regresaría al negro asfalto para no poner en riesgo mi maltrecha musculatura ¡Los cojones! Dos horas me pegué camino arriba, sendero abajo, trialera que va, riachuelo que viene… disfrutando como un cochino en un charco. Afortunadamente la pierna aguantó, a costa de ir siempre con un cuidado extremo y de hacer las subidas apretando casi a la pata coja.

En fin, quien me lo iba a decir a mí, que hasta no hace demasiado tiempo huía de senderos y caminos como de la peste y que llamaba a los que montaban sobre ruedas gordas “mariquitas de montaña”. Jota, no te reconozco, ¿que ha sido de aquel carretero convencido de hace unos años?...


P.D.: la foto está tomada, sin permiso, de un Sr. llamado Manolo Torres.




No hay comentarios:

Publicar un comentario